Por medio de una carta, el cardenal Oscar Rodriguez Maradiaga, presidente de Caritas Iternacional, afirmó que la Iglesia “no espera una conmemoración del Dia Mundial del Combate del SIDA (1° de Diciembre) para cumplir su mandato de servicio a los portadores de HIV”, y recordó que Caritas ha expresado la ternura a los enfermos y cercanía de la iglesia hace 25 años.
El HIV causa incertidumbres e inseguridades, con relación al propio futuro y por la propia familia, y puede provocar serias dolencias, inclusive la muerte, afirmó el cardenal.
Él explicó que, para combatir eficazmente el HIV, es preciso cuidar de las relaciones interpersonales y vivir la sexualidad dentro de un matrimonio fiel, entre un hombre y una mujer, y evitando el uso de drogas inyectables que no fueran recetadas por profesionales de salud.
El cardenal también recordó que es posible eliminar el número de muertes relacionadas al SIDA con un diagnóstico prematuro y un tratamiento para la infección por el HIV.
En los últimos años, se hicieron muchos progresos, gracias a la solidaridad internacional, para ampliar este tratamiento a aproximadamente diez millones de personas que viven en países de bajos ingresos, explicó Maradiaga, destacando que eso aún no es suficiente.
Por eso, el cardenal pidió una mayor responsabilidad a los gobiernos nacionales y recordó como, “infelizmente, las personas afectadas por el HIV continúan siendo objeto de discriminación, burlas y violencias”.
“No existe una vida humana más sagrada que otra, así como no existe una vida humana cualitativamente más significativas que otra”, concluyó el presidente de Caritas Internacional.