Inspiradas en el lema, “Todo lo puedo en aquel que me fortalece”, consagradas Oblatas dieron inicio a su primera asamblea regional, que reúne a mujeres de Haití, Cuba, Perú, Bolivia y Chile, entre otros países.
El Arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, inauguró este encuentro con una misa de acción de gracias por la oportunidad de realizar este evento eclesial en Chile, en la casa de retiro, “Siervas Del Espíritu Santo” en Las Condes.
Esta jornada, que convoca a 20 hermanas, se extenderá entre el martes 28 de enero y el lunes 3 de febrero de 2014 y tiene por objetivo reflexionar sobre el llamado que el Señor les hace. Descubrir su voluntad en los tiempos actuales, para ser sus testigos, anunciando la Buena Noticia como instrumento de Gracia y Salvación.
El Pastor de la Arquidiócesis les dijo en su homilía que, los carismas eran muy importante para la Iglesia, que es el Espíritu Santo el que se encarna es su espiritualidad: “ La Iglesia es como un cuerpo, con distintos miembros, cada uno tiene su función, pero la cohesión bajo el Espíritu Santo, signo de las bondades de Dios entre los hermanos”.
El Arzobispo también mencionó que este día, 28 de enero, está consagrado a Santo Tomás de Aquino, gran intelectual de la Iglesia, pero con una profunda experiencia de Dios: “Fue un teólogo qué valoró la sabiduría de Dios y la hizo luz en su camino. Estamos llamados a ser testigos de esa sabiduría y a través de nuestra humilde experiencia de fe, tenemos que ser puente de la manifestación de amor de Dios a los hermanos, revelando el signo de su presencia en el mundo”.
Además llamó a las Oblatas a volver a la fuente constantemente, para que nuestra fe sea fecunda: “ Esa fuente es Dios, nuestro único maestro que tiene palabras de vida eterna. En este tiempo necesitamos convertir nuestros corazones a su Palabra. Uno de los problemas de nuestra sociedad es que nos quedamos en la metodología y nos olvidamos del mensaje. El Papa Francisco nos dice en la exhortación apostólica que no divinicemos al método y que volvamos a poner en el centro a Jesús”, finalizó, monseñor Ezzati.
Fuente:Comunicaciones Iglesia de Santiago