Ya viví algunos “Acamps” (Campamentos Shalom) desde que conocí a la comunidad, 11 para ser exactos. Y como Dios nunca me deja acomodar, pude percibir cómo Él siempre puede lograr algo totalmente nuevo. En este Acamps Summer Festival, sentí que el Carisma Shalom es verdaderamente Internacional: No es sólo para los brasileños, sino que para el mundo. He descubierto que Dios, en verdad, nos envía a los confines de la tierra; que la semilla de la vocación brota hasta en las tierras más lejanas e inesperadas.
Somos un sólo carisma, que se extiende por todo el mundo. Personas de, aproximadamente, 10 nacionalidades diferentes que buscan un lenguaje común para comunicarse, para presenciar las maravillas de Dios, para expresar cómo actúa en la vida de cada uno. La lengua está lejos de ser una barrera, es más bien un puente que nos conecta con el otro. Y cuando no encontramos un lenguaje común, el Amor se desborda y habla por sí mismo.
El carisma que va más allá de mis límites interiores, también supera aquellos exteriores; no se detiene ante barreras, fronteras o muros construidos entre culturas y pueblos que pueden ser tan diferentes.
Lo que también alegra mi corazón, es ver a otras personas teniendo una experiencia real con Dios. He oído que: “esto no funcionaría con los europeos”, y me encanta la forma en cómo Dios demuestra lo contrario. ¡Sí Funciona! Son capaces de sentir la presencia de Dios, son capaces de regresar a la fe que un día sus antepasados dispersaron por el mundo. ¡El joven europeo también es capaz de ofrecer todo a Dios!
Victoria Ribeiro
Traducción: Marjori Small
