El día de 30 de junio, a pedido de Mons. Antonio Arregui, arzobispo de Guayaquil, cuatro de los cincos misioneros de la Comunidad Católica Shalom, que van a vivir en Guayaquil, llegaron a la ciudad para fundar la Misión Shalom.
Inicialmente los misioneros viven en departamentos del Edificio de Promoción Humana de la Curia, también ahí van a realizar grupos de oración, formación y trabajos de evangelización para los jóvenes, familias y niños, además de ayudar en los trabajos de evangelización de la Arquidiócesis.
El día 9 de julio, por providencia es el día de la fundación de la Vocación Shalom, los misioneros estuvieron con Mons. Antonio Arregui, Arzobispo y Mons. Giovanni Piccioli, Obispo Auxiliar, para una reunión sobre los trabajos de evangelización de la Misión Shalom en Guayaquil. El Arzobispo expreso su alegría por la venida de los misioneros y habló sobre el extenso campo que la Comunidad Shalom tiene para evangelizar, lo que también es una gran alegría para los misioneros que desean ofrendar toda su vida para anunciar la alegría del Evangelio.
“Estamos entusiasmados con la misión que Dios nos confió aquí en Guayaquil, pues vemos un pueblo sediento de Dios, con un corazón acogedor, creemos que el Señor desea realizar una obra nueva en sus vidas dándoles una nueva experiencia con Su Amor, que es perfecto y lleno de misericordia. En tan poco tiempo en Guayaquil ya probamos la fuerza del Carisma Shalom que misteriosamente por la acción divina va atrayendo a las personas hasta nuestra casa para conocer más del Carisma, en deseo de tener una experiencia con Dios, de orar y también descubrir su vocación”, afirma Glaucianne Santos, responsable local de la Misión Shalom en Guayaquil.
La Comunidad Shalom, es una nueva comunidad nacida en Fortaleza (Nordeste de Brasil) en 1982, reconocida por el Pontificio Consejo para los Laicos como una Asociación Internacional de Fieles. Una familia constituida por célibes por el Reino, matrimonios, sacerdotes, jóvenes y adultos, unidos por un llamado común a la donación total de nuestras vidas al Señor Jesucristo. A partir de la experiencia del Espíritu, realiza acciones evangelizadoras diversificadas en medio de los jóvenes, las familias, los niños, los pobres, los medios de comunicación, el mundo de las artes, del trabajo, de la ciencia y de la cultura. Establece y administra grupos de oración y centros de evangelización, de formación, de espiritualidad, de educación, de artes, de comunicación y promoción humana a través de obras de misericordia junto a los que sufren.
“Ahora llegamos en Guayaquil, en Ecuador, para compartir nuestra experiencia con Dios, que nos hizo nuevos hombres y mujeres que buscan la radicalidad evangélica, la santidad, la Voluntad de Dios que es nuestra perfecta alegría”, concluye Glaucianne.
Comunicación Shalom Guayaquil