En el año 2012 mi vida comenzó a cambiar, descubrí una verdad que ya existía hace 2012 años, pero que para mi era nueva. En realidad descubrí la verdad de mi propia historia.
Yo tenía muchos problemas con mi mamá, en el año 2010 mi papa había fallecido por un cáncer y en vez de unirnos más después de la tragedia, mas nos separábamos. Un día al llegar al colegio una compañera me llevo a la capilla que teníamos ahí , ya que era de colegio católico, y empezó a hablar de un encuentro personal con Jesús, dijo algo que nunca voy a olvidar, “el día que yo tuve mi encuentro personal con Jesús yo sentí que el peso de todo el colegio cayo de mis hombros” recuerdo que me burle de esa frase, yo creía que ya le conocía a Cristo porque desde pequeña iba a un colegio católico y solía ir a misa. Pero era tanto el dolor que sentía por mis peleas con mi madre que decidí ir a probar como eran sus grupos, era un grupo de la renovación carismática católica que todos los miércoles tienen misa de sanación y sábados grupos de oración, luego de varios encuentros yo experimente mi encuentro personal con Jesús y en ese momento sentí mucho más que solo el peso del colegio saliendo de mis hombros, sentí un amor tan intenso que no existen palabras para expresarlo, fue el día mas feliz de mi vida, el día que deje de preguntarle a Dios ¿por qué a mí? ¿Por qué a mí me tocaba una vida tan difícil?, empecé a conocer la verdad y ver su plan en mi vida.
Yo empecé a formar parte de ese grupo y verdaderamente Dios está en ese lugar pero mi corazón anhelaba mas, anhelaba una vocación de vida, anhelaba ser radical y la respuesta de Dios a ese anhelo no tardo en llegar. En ese mismo año mientras yo estaba en la casa de mis abuelos en Brasil, me invitaron a conocer la comunidad católica Shalom, dijeron que estaba llena de jóvenes de mi edad y quedaba solo a 3 cuadras de la casa de mis abuelos. Mi familia seguía metida en medio de tantos problemas provocándome una inmensa sed de Dios, así que decidí ir.
Al llegar ya me impacto la forma en cómo me recibieron, con tanto amor y cuidado, luego me invitaron a ir a pasar las 12 el día de año nuevo con ellos y como es costumbre en la comunidad, pasamos las 12 adorando al Santísimo, es hasta ahora ¡la adoración de mi vida! ver como todos esos jóvenes , porque la casa que era grande estaba repleta, adoraban al Señor y amaban a El de una manera intensa, real y hasta divertida, pude ver cómo vivían la radicalidad. Al terminar la adoración empecé a tomarme fotos con las chicas, se acerca un misionero y me dijo que Dios me había hablado, yo naturalmente pregunte ¿qué dijo? Respondiéndome “hoy empieza un tiempo de alegría en tu vida” lo cual se cumplió, hoy en día mi mamá se transformo y le conoció a Dios y nuestra relación de madre e hija también se transformo
¡Y no les puedo dejar de contar como pase mi cumpleaños de 18! Solo 4 días después de año nuevo, esos jóvenes que apenas me conocían prepararon una fiesta sorpresa por mi cumpleaños, me llevaron una torta, me hicieron carteles y me regalaron un libro del fundador de la comunidad Shalom. Pase todo el camino de regreso a Paraguay leyendo ese libro, yo solo reía y lloraba, porque me veía en una historia muy diferente pero con experiencias muy parecidas y pensaba esto tiene que llegar a Paraguay
Hoy en día después de 11 meses de la llegada de la obra Shalom a Paraguay, ya tuve muchas experiencias con el carisma, participe de retiros, me fui a la JMJ con la delegación de la comunidad, conocí donde nació la comunidad, hable con el fundador y la cofundadora, leí mas libros y lo único que pienso es lo mucho que Dios me ama porque El al crear este carisma pensaba en cada cosa que me gusta, porque cada día me sorprende como TODO lo que me gusta tiene esta comunidad y solo me enamoro mas y mas de esta magnífica vocación y de la verdad de Dios en mi vida… anímense a conocerla, se llevaran una sorpresa como la mía
Larissa Mota