“La dimensión Mariana de la espiritualidad Shalom nos conduce a una relación con Nuestra Señora siempre centralizada en el misterio de Cristo. Para contemplar en plenitud el rostro de Cristo, es indispensable hacerlo por medio de la mirada y del corazón de María. En la vocación Shalom tenemos a María como Madre y Maestra espiritual en el camino de la Paz.
En mayo de 2004, comenzó un periodo de gran desafío para mi. Puedo decir que ese último año, en especial, fue de gran prueba. En esos momentos siempre busco en el Señor sustento espiritual específico donde pueda apoyarme delante de cada tiempo o desafío particular. En oración, busqué percibir el recurso que el Señor me inspiraba. En aquella situación, percibí claramente, que el Señor me invitaba a ir más allá de la recitación de apenas uno de los misterios del rosario diario, invitándome a meditar diariamente los veinte misterios del santo rosario. Inmediatamente, decidí aumentar mi frecuencia a la escuela de María para dejarme, de forma más intensa, introducir en la contemplación de la belleza del rostro de Cristo y en la experiencia de la profundidad de su amor.
Puedo sinceramente testimoniar los innúmeros frutos que recibí con la recitación diaria del santo rosario, tanto en mi vida espiritual, como en las intenciones en él encomendadas. El rosario diario se transformó para mí en refrigerio y fortísimo recurso de intercesión por la Comunidad y por todos los hermanos necesitados. Pude contemplar grandes intervenciones de Dios a través de las manos de María, a punto de la famosa oración de S. Bernardo tomar un nuevo sabor en mis labios: ‘Nunca se oyó decir que quien a ti haya recurrido haya sido por ti desamparado’.
No es mi intención con este testimonio aumentar el compromiso del rosario diario que tiene la Comunidad shalom, sino incentivar a todos a renovar su relacionamiento amoroso y confiado con Nuestra Señora. Como hijos que necesitan el afecto y cuidados de la Madre, a ella recurramos cada día de nuestra vida. Por medio de ella sumerjámonos más intensamente en el misterio de Cristo, recibiendo la gracia de, por medio del camino de María, encontrar el camino de la Paz.
Al mismo tiempo, les agradezco a todos los hermanos que libremente atienden al apelo de unirse a mí por medio de la recitación del rosario, en favor de mis intenciones. Al contar con vuestra generosa y continua intercesión, estoy seguro de que también obtendréis grandes gracias´´.
Testimonio de Moysés Azevedo (Fundador de la Comunidad Católica Shalom)
Escritos De la Comunidad Católica Shalom – Carta a la Comunidad 2005