En el capítulo VII de nuestros Estatutos se encuentra un tema muy importante en nuestra vocación, La Divina Providencia. “Ella es la fuente de todo el sustento y desarrollo de los medios necesarios para el mantenimiento de la Comunidad y de toda la Obra Shalom.”
“Reconociendo en San José el gran instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret y en la vida de la Iglesia, lo proclamamos como Patrón de toda la Obra Shalom.”
Confiamos a la intercesión de este hombre santo todas nuestras necesidades y aprendemos a estar abandonados en las manos de Dios. Todos los días a la hora de bendecir la comida en todas nuestras casas de misión, le pedimos su intercesión rezando la oración a San José propia de nuestra Vocación, y así le encomendamos las necesidades de la Obra Shalom en todo el mundo, para que seamos fieles a la misión que el Señor nos confía. Además de celebrarlo en el mes de marzo con todo cariño y en todos los momentos confiarle nuestras necesidades. ¡Qué poderosa la intercesión de San José, eso lo podemos testimoniar en nuestra vida y en nuestra vocación!
San José, ¡Ruega por nosotros y provéenos!
Oración a San José que rezamos todos los días:
“Oh! glorioso San José, tú que fuiste elegido para ser el padre adoptivo de Jesús y fuiste instrumento de la Providencia Divina en la familia de Nazaret, te pedimos que auxilies y socorras a la Comunidad Católica Shalom, para que nunca nos falten los medios materiales necesarios, para cumplir los designios que Dios tiene para nosotros. Fortalezcas nuestra fe y nuestra generosidad, para que a través de nuestra fidelidad a la Comunión de Bienes, seamos constructores responsables de la Obra que nos ha sido confiada. Intercedas, para que las bendiciones de la Divina Providencia se derramen sobre toda la Obra Shalom, a fin de cumplir con nuestra misión de anunciar, con osadía, a Jesucristo Nuestro Señor. ¡Amén!”
Lea la exhortación apostólica que Juan Pablo II escribió sobre San José