Madagascar se volvió conocida a través de una película animada que tuvo mucho éxito. En la película, un león, una jirafa, una cebra y un hipopótamo que vivían en un zoológico de Estados Unidos, querían regresar a la selva pero terminaron viviendo una gran aventura en Madagascar, al suroriente de África. Pese a ser un país de gran riqueza natural, Madagascar es uno de los países más pobres y olvidados del mundo. Un gran número de nativos viven diariamente la aventura de la supervivencia, el hambre es común en muchos hogares.
La Comunidad Shalom llegó a la isla en 2007 para colaborar en la evangelización de la Iglesia local a través de obras sociales. Actualmente el apostolado abarca diversas iniciativas como visitas a hospitales, programas de radio locales, catequesis para niños, evangelización puerta a puerta, formación doctrinal en parroquias y cursos profesionales. En la casa Shalom de San José, cerca de 45 niños entre los 4 y los 14 años son recibidos por los misioneros para ser alfabetizados y participar en las catequesis, donde además, aprenden a orar y a establecer una relación con Dios.
Muchos niños han sido rescatados de situaciones de peligro social. Una vez al año los niños participan de un fin de semana especial de catequesis llamado ‘Seminario de vida en el Espíritu’. Los misioneros oran por los niños y los preparan para hablar con Jesús en el Santísimo Sacramento. Jesús es presentado a ellos como un gran amigo, el único capaz de hacer realidad sus sueños. Las peticiones de los pequeños a Jesús son presentadas espontáneamente y reflejan el sufrimiento que enfrentan en su cotidianidad: uno pide arroz, otro conocer a su padre, otro conocer a su madre y otro no volver nunca a sentir hambre. A pesar tal sufrimiento todos regresan a sus hogares llenos de esperanza, porque saben que sus oraciones han sido escuchadas y que pueden confiar en su nuevo y poderoso amigo.
