En este Tiempo Cuaresmal, la Iglesia abre un espacio para celebrar la solemnidad de San José, esposo de la Virgen María, que, en el temor del Señor, supo acoger el misterio que le fue confiado. Hombre justo y fiel, a quien Dios confió la misión de ser el responsable de la casa de Nazaret. Esta Solemnidad es conmemorada el 19 de marzo, por ello, queremos rezar contigo, la novena de San José, entre el 10 y el 18 de marzo.
1º día – San José, el gran instrumento de la Divina Providencia en la Familia de Nazaret
San José, siervo de la Caridad, que acogiste con fe y coraje la misión de ser instrumento de la Divina Providencia para con Jesús y María, aumenta nuestra fe, el coraje y la confianza en Dios para que así, también nosotros, seamos instrumentos de la Providencia, por voluntad de Dios desde la creación del mundo.
Oración para todos los días:
Amado San José, tú que fuiste instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret, en la Iglesia y para con vuestros hermanos, fija nuestros ojos en las cosas que no pasan y danos la gracia de ordenar nuestras vidas para los tesoros del cielo. ¡Amén!
En seguida, se reza un Padre-Nuestro, un Ave María, un Gloria.
2º día – San José, el grande instrumento de la Providencia Divina en la vida de la Iglesia
San José, siervo fiel y prudente, Patrón de la Iglesia Católica en el mundo entero, protegiendo y siendo instrumento de la Divina Providencia para Jesús, su Divino Fundador, y para María, su Modelo más perfecto, danos la gracia de que, también nosotros, a pesar de nuestro pecado e indignidad, tengamos el privilegio de ser instrumentos de la Providencia de Dios en la Iglesia de tu Hijo Jesús.
Oración para todos los días:
Amado San José, tú que fuiste instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret, en la Iglesia y para con vuestros hermanos, fija nuestros ojos en las cosas que no pasan y danos la gracia de ordenar nuestras vidas para los tesoros del cielo.
Padre-Nuestro, un Ave María, un Gloria.
3º día – San José, Patrono de toda la Obra Shalom
San José, humildísimo siervo del Señor, que eres instrumento de la Providencia Divina de la Obra Shalom, sé nuestra fuente de inspiración y modelo para que, olvidados de nosotros mismos, sirvamos a Dios y seamos mediadores de Su Providencia para la evangelización a través de la Obra que nos fue confiada.
Oración para todos los días
Amado San José, tú que fuiste instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret, en la Iglesia y para con vuestros hermanos, fija nuestros ojos en las cosas que no pasan y danos la gracia de ordenar nuestras vidas para los tesoros del cielo.
Padre-Nuestro, un Ave María, un Gloria.
4º día – San José, auxilio y socorro para la institución de la Paz en el mundo
San José, siervo dulcísimo, que educaste con ejemplo, dulzura y firmeza al Hijo de Dios que te fue confiado, enseñándole el valor del trabajo como medio de convivencia y viéndole crecer en gracia y sabiduría en vista de la implementación de Su Paz en el mundo, auxílianos con los medios necesarios para la educación de nuestros hijos y la formación de quienes evangelizamos para que sean, también ellos, alegres testigos de Resucitado que pasó por la cruz.
Oración para todos los días:
Amado San José, tú que fuiste instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret, en la Iglesia y para con vuestros hermanos, fija nuestros ojos en las cosas que no pasan y danos la gracia de ordenar nuestras vidas para los tesoros del cielo.
Padre-Nuestro, un Ave María, un Gloria.
5º día – San José, constructor de los espacios sagrados
San José, siervo e trabajador diligente, que construiste para Jesús y María la casa en que reinaran, a perfección, la caridad y la alegría, ayúdanos a construir en nuestros hogares y en la Obra espacios sagrados dignos de la presencia viva de tu amado Jesús.
Oración para todos los días:
Amado San José, tú que fuiste instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret, en la Iglesia y para con vuestros hermanos, fija nuestros ojos en las cosas que no pasan y danos la gracia de ordenar nuestras vidas para los tesoros del cielo.
Padre-Nuestro, un Ave María, un Gloria.
6º día – San José, mantenedor del culto divino
San José, siervo piadoso, que tuviste para con Jesús y María una permanente postura de oración, veneración, protección y cuidado, sirviendo junto a María a Aquel que adorabas, haznos instrumentos de la Divina Providencia para que nunca se extinga ni venga a menos la belleza, el brillo, la dignidad y la piedad del culto divino en nosotros.
Oración para todos los días:
Amado San José, tú que fuiste instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret, en la Iglesia y para con vuestros hermanos, fija nuestros ojos en las cosas que no pasan y danos la gracia de ordenar nuestras vidas para los tesoros del cielo.
Padre-Nuestro, un Ave María, un Gloria.
7º día – San José, modelo del abandono en las manos de Dios
San José, siervo confiado, que no temiste en tomar bajo tu protección y sustento a María y Jesús y, abandonado a las manos de Dios, en su Providencia, le serviste durante toda vuestra vida sin retener para ti nada del fruto de tu trabajo, enséñanos a acoger la gracia del completo abandono en las manos del Padre, quien cuida de nosotros mucho mejor que nosotros mismos.
Oración para todos los días:
Amado San José, tú que fuiste instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret, en la Iglesia y para con vuestros hermanos, fija nuestros ojos en las cosas que no pasan y danos la gracia de ordenar nuestras vidas para los tesoros del cielo.
Padre-Nuestro, un Ave María, un Gloria.
8º día – San José, educador en la vivencia de la sobriedad
San José, siervo sobrio y justo, que nunca consideraste como vuestro aquello que podría ser superficial, mas, lejos de ello, supiste compartir aquello que Jesús, María y tus hermanos necesitaban, enseñarnos que lo innecesario no nos pertenece, así como, en vista de la caridad, deja de pertenecernos lo que nuestro hermano necesita.
Oración para todos los días:
Amado San José, tú que fuiste instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret, en la Iglesia y para con vuestros hermanos, fija nuestros ojos en las cosas que no pasan y danos la gracia de ordenar nuestras vidas para los tesoros del cielo.
Padre-Nuestro, un Ave María, un Gloria.
9º día – San José, ícono do espíritu de pobreza
San José, siervo pobre del Señor, que entendiste ser el compartir original, la misma participación de la Trinidad para con nosotros, y que, en Jesucristo, te dejaste moldar por el espíritu de convivencia y comunión que antecedían al pecado original, concédenos, por el poder de vuestro Hijo, la gracia de honrar nuestro Bautismo con la conversión al compartir y comunión del origen, ahora elevada a la caridad por los méritos de Cristo.
Oración para todos los días:
Amado San José, tú que fuiste instrumento de la Providencia Divina en la Familia de Nazaret, en la Iglesia y para con vuestros hermanos, fija nuestros ojos en las cosas que no pasan y danos la gracia de ordenar nuestras vidas para los tesoros del cielo.
Padre-Nuestro, un Ave María, un Gloria.
ORACIÓN FINAL
Glorioso San José, que fuiste modelo de vivencia de la pobreza, de la sobriedad, de instrumento de la Divina Providencia; tú que no retuviste ningún bien material o espiritual, destinándoles siempre a las necesidades de Jesús, de María y tus hermanos; tú que, por gracia divina, viste en tu gestión restaurada la vocación original del hombre a la caridad, el trabajo, al compartir y a la comunión; tú que, inspirado por el Espíritu Santo, acogiste la nueva economía del Reino de tu Hijo Jesús, intercede para que acojamos de la misma forma la invitación que te hizo el Padre: de ser instrumentos de Su Paz, de Su Providencia, de Su Caridad, de Su Pobreza para el hombre de hoy. Amén.
Pedimos a nuestro amado San José le conceda el favor de que mi hijo Cristóbal Miguel Gómez Gutiérrez consiga el trabajo que Dios le tiene preparado, para que con este pueda seguir sirviendo las obras de Dios en armonía con todos en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Amen 🙏